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La estructura, tanto horizontal como vertical, se propone de hormigón armado, organizado sobre una malla de 6,60m x 6,60m, por ser éste un material más estable a las cargas dinámicas y sufrir deformaciones menores que otros materiales, así como ser de una gran durabilidad. En las plantas superiores a la Baja, el forjado de hormigón armado, se propone ejecutar en su totalidad con elementos prefabricados de placas alveolares pretensadas, con alveolos de poliestireno, sistema de mayor rapidez de ejecución, que el sistema tradicional de losa maciza, y de mucho menor peso propio. El forjado de Pl. Baja, sin embargo, estará ejecutado mediante la solución tradicional de losa maciza de hormigón armado, por ser el techo del "Abri PC" y necesitar mayor resistencia al derrumbe de las plantas superiores. El cerramiento de fachadas, en sus partes ciegas, se propone realizar con paneles auto-portantes, prefabricado arquitectónico, de hormigón armado con fibra de vidrio color blanco, CCV. También se acabarán, en sus partes ciegas, tanto en el exterior como en el interior, y con el mismo material, CCV, los recintos de escalera, los huecos de ascensores, los conductos de patinillos de instalaciones y los cuartos de limpieza. Esta propuesta de utilizar elementos prefabricados, en la estructura horizontal y en el acabado de las fachadas, entendemos que puede producir un muy importante acortamiento de los tiempos de duración de la construcción. La prefabricación, realizada durante el periodo de ejecución del vaciado, muro de contención perimetral y estructura vertical del sótano, ejecución de la losa de planta baja, y elementos estructurales verticales, se puede suministrar y montar inmediatamente, con una materialización del edificio de manera rapidísima, prácticamente dependiendo de los movimientos de las grúas en obra, que son limitados. La prefabricación, entendemos, es el sistema de construcción de mayor sostenibilidad energética posible, por la unificación de las labores de transporte de materia prima y de los elementos de moldeado al taller, y no a la obra y por utilizar los elementos auxiliares de fabricación en uso repetido y no único, con el consiguiente ahorro energético y de emisiones de CO2, en todas las labores, ya que se suministra elemento finalista terminado y no materiales que requieren una complicada elaboración "in situ". Otro factor, que mejora la calidad del producto edificado, es la máxima calidad acústica de los elementos prefabricados, sobre todo en particiones en el interior del edificio, en áreas ruidosas de ascensores, escaleras o conductos técnicos. En cuanto al mantenimiento de un elemento prefabricado de hormigón CCV, es elemental, agua y jabón neutro con la periocidad que requiera la contaminación climática de la zona, pero sin necesidad de picado, repintado o cualquier otra complicada labor mecánica sobre su superficie. Cerramiento de fachadas con paneles estructurales de prefabricado arquitectónico, auto-portante, de hormigón armado con fibra de vidrio, color blanco, CCV, según se ha definido en el epígrafe anterior. Paneles de madera laminada encolada, tratada con fungicidas e insecticidas en autoclave a alta presión, colocados verticalmente cada 1,10m, según se define en los alzados de la propuesta. |
